7 De La Tarde
A Ana Lucía
A punto de terminar
mi travesía por estas
libradas
tierras de
guitarras y
poesías...
Me confieso:
Que anhelo
el roce de tu
piel
y tu aliento
desesperado
al amar
Tus pequeñas
manos
Adornando de
caricias
Esta piel
ardiente
De playa y de
mar
Tus mágicas
y
melodiosas
palabras
adormecen mis
párpados,
mis sentidos
y mi voz,
que también
es anhelada
desde esta
mágica isla
que es solo
Para dos.
La Habana, Agosto 4 de 2001.